Una adecuada planificación turística permite el mejoramiento del fuljo turístico, influye en el crecimiento de las condiciones de vida de la población en sus diversos ámbitos, genera una fuente de ingresos que impulsa el desarrollo económico de un país, promueve la infraestructura física para la actividad en sí y para el disfrute de la comunidad locale integra una política de desarrollo con estrategias y acciones en curso planificadas a corto y mediano plazo.